Cuando te vas a otra ciudad, a otro continente tu percepción de la realidad se distorsiona, las cosas dejan de significar lo mismo y todo lo que te parecía claramente diferente tiende a fusionarse en una sola cosa mezclada como una bola de plastilina de distintos colores.
Las cosas pierden materia y los sueños se vuelven reales ya que te llevan a lugares extraños tan extraños como los que estas viviendo, cuando te das cuenta que tu apego con la realidad no es real, sino una fantasía que la haz vivido por mucho tiempo o un sueño que ha durado mucho y se vuelve cotidiano, en este punto todo parece posible, ya no hay ficción ni realidad y estos conceptos pierden sentido, y por otro lado lo único real es lo que puedes imaginar, mi mundo solo esta limitado por mis pensamientos y lo que hago respecto de ellos, si los dejo dentro mucho tiempo empiezan a chocar entre ellos en mi cabeza produciendo dolores de cabeza y corto circuitos que me dejan inconsciente por un tiempo.